¡Un salario justo por una jornada de trabajo justa! Es el lema conservador plasmado en las banderas de los trabajadores asalariados del continente Europeo, se exige un aumento de jornales ante el robo indiscreto que se embolsan los patrones. El ciudadano Weston miembro del Consejo General, queriendo actuar a favor de los trabajadores, expone su opinión acerca de la infructuosa petición de la subida de salarios: decía que la lucha por el aumento de salarios no iba a engendrar ningún resultado, su deducción era que frente a cualquier aumento de jornales que pudieran lograr los trabajadores los propietarios iban a aumentar los precios correspondientes, se podría reducir que cualquier aumento salarial tiende a un aumento en las mercancías. A partir de esto Carl Marx, pensador socialista y revolucionario considera que el aporte de Weston interfiere y es de suma importancia dentro de la clase trabajadora, admitiendo que se necesita tocar el trasfondo del problema. En su obra “Salario precio y ganancia”, texto de su discurso en las sesiones del Consejo General de la Primera Internacional de 1865, y surgiendo de la palabras pronunciadas de John Weston, Marx difiere haciendo una crítica de sus argumentos. En las observaciones preliminares de su obra Marx explica que como dirigentes de la asociación internacional se tiene que tener un criterio firme ante el problema, y también exclama que las teorías tomadas de la economía burguesa de Weston son falsas.
Salario, precio y ganancia // Trabajo asalariado y capital
$6.000
Editorial: Editorial Molino
Agotado