“Durante siglos, los tehuelches fueron los dueños de la Patagonia, en elsur argentino.
Allí crearon una manera de vivir y de entender la vida; es decir, una cultura. Y en las noches, mientras el viento frío soplaba sacudiendo los toldos de cuero, contaron muchas historias. Historias de cuando se creo el mundo. Historias de Elal, el gran héroe, el que trajo tantos inventos para ayudar a los hombres. Historias de cuento los animales hablaban y discutían sus cosas en reuniones bochincheras, y de cuento la ballena no vivía en el mar sino en la tierra y hacia desastres bostezando y bostezando. Historias que pocas veces llegaron a las ciudades y a otras partes del país.”