Jacksonismo. Michael Jackson como síntoma, Mark Fisher.
Jacksonismo. Como nos advierte Mark Fisher, este libro nació de la convicción de que la muerte de Michael Jackson debía ser abordada por algo más que tributos fáciles o biografías abultadas. Sus autores –una selección de críticos culturales y musicales entre los que se encuentran Ian Penman, Simon Reynolds, Barney Hoskyns y Steven Shaviro– coinciden en que su obra y su vida son un síntoma que requiere ser interpretado, y que su muerte, ocurrida justo después de la última crisis financiera y de la elección de Barack Obama como presidente de los Estados Unidos, marcó el final de una era que él más que nadie había ayudado a definir.
Muñecos, zombies, colosos, cyborgs, objetos fetiche y personajes de fantasía como Peter Pan o Mickey Mouse, que obsesionaron por completo a Michael Jackson, habitan estos ensayos no solo como testimonio del encantamiento y la hechicería con la que impregnó toda su obra, o como presagio de los desastres personales que erosionaron su carrera, sino ante todo como jeroglíficos en cuya superficie se refleja la trama que conecta a Jackson con la expansión del mundo neoliberal, globalizado y hipermediatizado en el que vivimos hoy.
Ese proceso, que comenzó en la década del ochenta y que implicó la mercantilización de todos los aspectos de la vida, encontró en el Rey del Pop –la mercancía más absoluta y universal– a su mayor promulgador. Su cuerpo –cuerpo postracial, posthumano y andrógino– encarnó la voluntad de dominación planetaria del capital, su capacidad implacable de abstraerlo todo y al mismo tiempo investirlo con una fuerza libidinal irresistible.