En 1932, Benito Mussolini se encontraba embriagado por la gloria de ser el Duce de Italia. El fascismo triunfante parecía una esperanza para el país, e incluso un modelo exportable. Y fue en pleno auge del fascismo cuando el famoso biógrafo alemán Emil Ludwig consiguió entrevistarle largamente y plasma sus interminables diálogos en Conversaciones con Mussolini, publicado en doce idiomas. A pesar del monólogo con que se enfrentaba, Ludwig consiguió, desde una óptica independiente y crítica, dar al lector un perfil de Mussolini y desarrollar, a través del propio interesado, sus dimensiones políticas, culturales y humanas, con toda su pompa, su escenario y su mitología.
Conversaciones con Mussolini es un fehaciente documento histórico-político y el espejo de un período agitado de Europa.