En el barrio todo fue guerreado entre todos

´´ ¿Que hace una mujer sin dinero para levantar un rancho? Yo conté con
suerte. Me acuerdo de que las muchachas de son Saúl estaban todas jovencitas,
y ellas fueron las que me metieron la ahí. Primero, lo forramos en plástico
negro y en cartón, y el techito, teja de cartón, campesina que llamaban. Ellas
todos los días se venían de la escuela y empezaban a clavar clavitos, hasta
que tapamos la casa toda; eso era un salón así, ¡grande! De ahí ya lo fuimos
cambiando por una madera de retal, por me prestaron cincuenta mil pesos para
que lo forrara. Esas mismas vecinitas fueron las que me ayudaron a clavarla;
esas peladas se amañaban mucho conmigo ahí… Ahora que uno mira para atrás se
da cuenta de que son vecinas de toda la vida´´